¿No puedes bajar de peso? Esta puede ser la razón

Ciertamente es frustrante cuando tratamos de mantenernos en forma y saludables al deshacernos del exceso de peso, y nuestros cuerpos se rebelan contra nosotros. "¿Por qué recuperamos peso después de hacer dieta?" es la pregunta que los especialistas en nutrición se han esforzado por responder, y un nuevo estudio ahora ofrece nuevos conocimientos.

¿Por qué recuperamos peso tan fácilmente después de períodos de ayuno intermitente? Todo puede deberse a una proteína, muestra un nuevo estudio.

Estudios recientes han demostrado que a pesar de nuestros esfuerzos por perder peso, tendemos a recuperar esos kilos inmediatamente después de que finaliza nuestro programa de dieta.

Algunos estudios también sugieren que la razón por la que nuestros cuerpos insisten obstinadamente en almacenar el exceso de grasa podría deberse a mecanismos biológicos profundamente arraigados.

Ahora, científicos de la Universidad de Monash en Melbourne, Australia, han descubierto otro jugador clave en el complejo mecanismo de mantenimiento del peso: una proteína llamada carnitina acetiltransferasa (Crat).

El profesor Zane Andrews y su equipo trabajaron con ratones y notaron que la proteína Crat, que también se encuentra en el cuerpo humano, parecía jugar un papel decisivo en la regulación del almacenamiento de grasa en el cuerpo.

Descubrieron que esta proteína era especialmente sensible en el contexto de dietas repetidas, o "dietas yo-yo", que parecen condicionar al cuerpo a "abastecerse" para los períodos de ayuno que se registran como una situación peligrosa de escasez de recursos.

Los hallazgos del equipo se publicaron a principios de esta semana en la revista. Informes de celda.

La respuesta automática al hambre

Un problema con la dieta, explican los autores del estudio, es que desde un punto de vista evolutivo, desencadena señales en nuestros cuerpos para decir que estamos experimentando un período de escasez de alimentos.

Por lo tanto, cuando un período de ayuno controlado llega a su fin, nuestros cuerpos están acondicionados para almacenar tanta grasa como sea posible, de modo que esta se pueda convertir en energía más tarde, cuando podamos experimentar "hambruna" una vez más.

Este es particularmente el caso cuando se trata de dietas yo-yo; activa el "sistema de alarma" de nuestros cuerpos.

Los investigadores notaron en sus experimentos con ratones que una proteína en particular, Crat, era clave para "decirle" al cuerpo si sigue o no almacenando grasa en condiciones de dieta yo-yo.

Esta proteína se encontró en las células cerebrales de los ratones que procesan la sensación de hambre y luego ayudan a regular la ingesta y el consumo de calorías.

Sin embargo, cuando los investigadores apagaron el gen que codifica esta proteína en algunos de los animales, notaron que el mecanismo de aumento de peso se vio afectado de inmediato.

Estos ratones, cuando fueron expuestos a dietas yo-yo, consumieron su reserva de grasa mucho más rápido que sus contrapartes con un gen Crat activo.

Esto llevó al profesor Andrews y sus colegas a plantear la hipótesis de que si pudiéramos encontrar una manera de apagar la actividad de la proteína en los humanos, podríamos evitar que el cuerpo perciba la dieta como un signo de inanición inminente, contrarrestando así la respuesta de rebote habitual.

"La manipulación de esta proteína ofrece la oportunidad de engañar al cerebro y no reemplazar el peso perdido a través del aumento del apetito y el almacenamiento de grasa", explica el profesor Andrews.

Además, si se puede desarrollar una terapia dirigida a Crat, sería útil no solo para tratar la obesidad, sino también para combatir otras afecciones metabólicas asociadas con ella, incluida la diabetes tipo 2.

"Al regular esta proteína, podemos asegurarnos de que la pérdida de peso inducida por la dieta se mantenga en lugar de volver a escabullirse".

Prof. Zane Andrews

none:  sistema inmunológico - vacunas fibromialgia próstata - cáncer de próstata