¿Qué es la aspiración?

La aspiración pulmonar es el término médico para una persona que inhala accidentalmente un objeto o líquido en la tráquea y los pulmones. Esto puede provocar tos, dificultad para respirar, malestar y, a veces, asfixia.

La mayoría de las personas experimentan ocasionalmente aspiración pulmonar cuando algo que están comiendo o bebiendo "sale mal".

O bien, la aspiración puede ser un problema continuo que resulta de una condición de salud subyacente.

El término aspiración también puede referirse a un procedimiento médico, durante el cual un médico usa un tubo de succión o una aguja para eliminar el líquido no deseado de una parte del cuerpo de una persona.

En este artículo, discutimos los diferentes significados de aspiración y describimos causas, factores de riesgo y complicaciones.También analizamos las estrategias de tratamiento y prevención, cómo la aspiración afecta a los niños y cuándo consultar a un médico.

¿Qué es la aspiración?

La aspiración tiene dos significados relacionados con la salud. Una es una afección médica y la otra es un procedimiento, por lo que es útil comprender la diferencia.

Aspiración pulmonar

Los síntomas de la aspiración pueden incluir tos, sibilancias y dolor al tragar.

La aspiración pulmonar es una afección que ocurre cuando una persona inhala una sustancia extraña en la tráquea y los pulmones.

A menudo sucede cuando algo que una persona está comiendo o bebiendo sale mal. O puede ocurrir cuando alguien inhala:

  • agua, como al nadar o jugar en una piscina o río
  • saliva
  • contenido del estómago, incluido el vómito
  • humo, vapores o polvo

Estas sustancias pueden bloquear parcialmente las vías respiratorias e irritar los pulmones, lo que puede provocar tos, dificultad para respirar y otros síntomas.

El procedimiento de aspiración

La aspiración también puede referirse a un procedimiento médico, durante el cual un profesional de la salud usa un tubo de succión o una aguja para eliminar el líquido dañino de los pulmones, las articulaciones, los abscesos u otros órganos o tejidos.

Un médico también puede realizar una aspiración para tomar una muestra de líquido y analizarla en busca de signos de infección, células cancerosas o la presencia de ciertas sustancias.

Síntomas

Cuando una persona aspira algo en sus vías respiratorias, es posible que no cause síntomas obvios.

Sin embargo, si la sustancia bloquea incluso parcialmente la tráquea o irrita los pulmones, puede provocar:

  • tosiendo
  • una sensación de que algo está atascado en la garganta
  • dolor al tragar
  • sibilancias
  • dificultad para respirar
  • una voz ronca

Causas

Por lo general, cuando una persona come o bebe, la comida o el líquido pasan de la boca a la garganta y descienden a través del esófago o esófago hasta el estómago.

La aspiración pulmonar ocurre cuando la sustancia pasa accidentalmente a la tráquea y los pulmones en lugar del esófago. Por lo general, esto se debe a un problema con el reflejo de deglución o una falta de control de la lengua.

La aspiración también puede ocurrir mientras una persona se somete a una cirugía bajo anestesia. El contenido del estómago puede viajar hasta la boca, luego bajar a través de la tráquea y llegar a los pulmones.

La anestesia reduce el nivel de conciencia y la capacidad de una persona para proteger sus vías respiratorias, lo que aumenta el riesgo de aspiración. Es por eso que los médicos a menudo piden a las personas que ayunen antes de someterse a un procedimiento quirúrgico.

Los anestesistas también toman precauciones para prevenir la aspiración, como proteger las vías respiratorias con intubación después de administrar la anestesia.

Algunas condiciones de salud también pueden aumentar el riesgo de una persona de aspiración pulmonar.

Factores de riesgo

La mayoría de las personas ocasionalmente aspiran algo a sus pulmones y ciertos problemas pueden aumentar este riesgo.

Un estudio transversal de 2015 investigó los factores de riesgo de aspiración en 105 personas que habían experimentado al menos un accidente cerebrovascular.

La investigación indicó que los participantes con cualquiera de las siguientes condiciones tenían siete veces más probabilidades de desarrollar aspiración:

  • disfagia, que es el término médico para la dificultad para tragar
  • un reflejo nauseoso alterado o ausente
  • movilidad física reducida
  • trastornos neurológicos, como la enfermedad de Parkinson

Los factores adicionales que pueden aumentar el riesgo de aspiración de una persona incluyen:

  • intoxicación por drogas o alcohol, que puede provocar alteraciones de la conciencia y los reflejos
  • demencia
  • enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE)

Complicaciones

Los síntomas de la neumonía por aspiración pueden incluir fatiga y fiebre.

La aspiración puede introducir sustancias o cuerpos extraños dañinos en los pulmones, lo que puede crear problemas adicionales.

Por ejemplo, cuando una persona aspira algo que contiene bacterias dañinas en los pulmones, esto puede provocar una infección e inflamación, que caracterizan una afección llamada neumonía por aspiración.

Los síntomas de la neumonía por aspiración pueden incluir:

  • una tos crónica
  • toser sangre o esputo verde
  • fiebre
  • Dolor de pecho
  • fatiga
  • dificultades para respirar, como falta de aire o sibilancias

Cuando la aspiración involucra humos tóxicos, se puede desarrollar una neumonía química.

Aunque no hay infección, la neumonía química causa inflamación y síntomas similares a los de la neumonía por aspiración.

Aspiración en niños

Según el Children's Hospital Colorado, la aspiración es un problema común en los niños, y es posible que un padre o cuidador no se dé cuenta hasta que el niño se ahogue o desarrolle una tos crónica.

Un estudio de 2016 revisó los registros médicos de 102 niños que se sometieron a una endoscopia después de tener síntomas de aspiración. Los investigadores encontraron que 49 de estos niños habían aspirado fragmentos de nueces o semillas.

Los síntomas de la aspiración en los niños pueden no ser los mismos que los de los adultos y pueden incluir:

  • una expresión de mueca
  • succión débil
  • babeo excesivo
  • problemas de alimentación o dificultad para respirar al alimentarse
  • sibilancias
  • frecuentes infecciones de pecho

Los factores de riesgo de aspiración en niños pueden incluir:

  • ERGE
  • un paladar hendido
  • afecciones neurológicas, como parálisis cerebral
  • precocidad
  • enfermedad cardiaca crónica

Las opciones de tratamiento para los niños con aspiración crónica pueden incluir medicamentos para la ERGE, terapia ocupacional o del habla y cirugía.

Cuando ver a un doctor

La aspiración no siempre requiere tratamiento médico. Sin embargo, si surge alguno de los siguientes síntomas, llame al 911 o vaya a la sala de emergencias:

  • asfixia o una vía respiratoria bloqueada
  • respiración ruidosa
  • piel o uñas azuladas
  • Dolor de pecho
  • sibilancias

Los síntomas de la aspiración no siempre se presentan de inmediato; pueden tardar horas o días en desarrollarse.

Consulte a un médico si se presentan los siguientes síntomas después de la aspiración:

  • fiebre
  • aumento de la producción de moco
  • tos crónica
  • tosiendo sangre
  • moco maloliente

Tratamiento

El tratamiento para la aspiración depende de la gravedad de los síntomas de una persona y del material que inhaló. En algunos casos, el tratamiento es innecesario.

Si un objeto, como un trozo de comida, todavía está en los pulmones, el médico puede recomendar una broncoscopia.

Durante este procedimiento, un profesional de la salud insertará un tubo con una cámara por la garganta de una persona hasta los pulmones para eliminar el material extraño.

Para las personas con neumonía por aspiración, un médico puede recetar antibióticos para ayudar a eliminar la infección.

Cuando la aspiración es el resultado de una afección médica, como un accidente cerebrovascular, la terapia del habla puede ayudar a mejorar el reflejo de deglución de una persona y reducir el riesgo de aspiración.

Los cambios en la dieta y el estilo de vida también pueden ayudar a tratar la aspiración crónica. Si no responde a estos métodos, una persona puede requerir alimentación por sonda para satisfacer sus necesidades nutricionales.

Prevención

Una persona puede tomar bocados más pequeños de comida y masticar lentamente para reducir el riesgo de aspiración pulmonar.

Una persona puede tomar medidas para reducir su riesgo de aspiración pulmonar, que incluyen:

  • tomar bocados más pequeños de comida y masticar lentamente
  • evitar los alimentos que son difíciles de masticar, como los cortes grasos de carne
  • abstenerse de comer o beber mientras está acostado
  • Evitar darles a los niños alimentos que sean fáciles de atragantar, como nueces, semillas, salchichas y uvas.
  • asistir a terapia del habla o ocupacional para mejorar las técnicas de deglución
  • siguiendo las instrucciones del médico para ayunar antes de la cirugía
  • hablar con un médico sobre los medicamentos que afectan la deglución

Resumen

La aspiración puede referirse a una condición de salud o un procedimiento médico.

Durante el procedimiento, un médico usa un tubo de succión o una aguja para extraer líquido de una parte del cuerpo de una persona.

La condición de salud, llamada aspiración pulmonar, ocurre cuando una persona inhala accidentalmente una sustancia extraña, como comida o bebida, en sus pulmones.

Los síntomas pueden variar en gravedad, pero las personas a menudo pueden toser el material inhalado.

La inhalación de sustancias nocivas puede provocar complicaciones como neumonía. Ciertas afecciones médicas, incluidas la disfagia y la ERGE, pueden aumentar el riesgo de aspiración de una persona.

La aspiración leve no suele requerir tratamiento. Sin embargo, consulte a un médico si el material extraño se atasca en los pulmones o si se desarrollan síntomas de neumonía.

Para las personas con aspiración crónica, el médico se centrará en tratar la causa subyacente. Además, la terapia del habla puede ayudar a mejorar la técnica de deglución y el control de la lengua de una persona.

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