12 causas de tobillos hinchados

Hay muchas causas diferentes de hinchazón de los tobillos. En la mayoría de los casos, la hinchazón se debe a una lesión o un edema.

El término edema significa hinchazón debido a la acumulación de exceso de líquido. Es particularmente común en la parte inferior de la pierna, los tobillos y los pies.

En este artículo, analizamos 11 causas de los tobillos hinchados y cubrimos algunas de las mejores opciones de tratamiento.

Las posibles causas de los tobillos hinchados incluyen:

1. Lesión de pie o tobillo

Una persona puede experimentar inflamación debido a una lesión en el tobillo o el pie.

Las personas que sufren una lesión en el pie o el tobillo pueden experimentar inflamación en esa área, lo que hace que parezca hinchada.

Un esguince de tobillo es una de las lesiones más comunes del pie.

La Sociedad Estadounidense de Tobillo y Pie Ortopédico recomienda el siguiente tratamiento en el hogar para un esguince de tobillo:

  • descansando
  • usando una tobillera
  • aplicar hielo en un paño fino durante no más de 20 minutos
  • aplicando una envoltura de compresión
  • elevar el pie por encima de la cintura

2. Celulitis

Las infecciones bacterianas en la piel se llaman celulitis. Las personas con diabetes son particularmente propensas a este tipo de infección.

La celulitis puede causar una variedad de síntomas, que incluyen enrojecimiento, piel caliente e hinchazón que se propaga rápidamente. En casos raros, la celulitis puede poner en peligro la vida sin tratamiento.

Las personas con celulitis necesitan tomar antibióticos. Es fundamental que informe a un médico si la hinchazón no disminuye o empeora después de unos días de tratamiento.

3. Efecto secundario de la medicación

Algunos medicamentos pueden hacer que los tobillos se hinchen como efecto secundario. Dichos medicamentos incluyen:

  • antidepresivos
  • píldoras anticonceptivas y otras que contienen estrógeno
  • pastillas de testosterona
  • bloqueadores de los canales de calcio para la presión arterial alta
  • esteroides

Las personas que sospechan que sus tobillos están hinchados como efecto secundario de la medicación pueden querer hablar con su médico.

Un médico puede recetar medicamentos diuréticos o sugerir métodos para reducir la hinchazón si le resulta incómodo.

4. Insuficiencia venosa crónica

El tipo más común de edema es el de insuficiencia venosa crónica (IVC). La CVI es una afección que afecta las válvulas de las venas de las piernas.

Estas válvulas generalmente se aseguran de que la sangre fluya hacia el corazón. En CVI, sin embargo, las válvulas funcionan mal y permiten que parte de la sangre fluya hacia atrás y se acumule en la parte inferior de las piernas y los tobillos.

Aunque CVI no tiene complicaciones graves, puede ser doloroso e incómodo. También puede causar cambios notables en la piel.

Un médico puede ayudar a una persona con CVI a desarrollar un plan de tratamiento personalizado.

Ejemplos de algunas opciones de tratamiento incluyen:

  • mantener las piernas elevadas para mejorar el flujo sanguíneo
  • usar medias de compresión para reducir la hinchazón
  • tomando medicamentos, como aspirina
  • someterse a ablación por radiofrecuencia, que utiliza calor para cerrar la vena afectada

5. Coágulos de sangre

A veces, se puede desarrollar un coágulo de sangre o "trombosis" en una de las venas del brazo o la pierna. Esto se llama trombosis venosa profunda (TVP) y requiere atención médica urgente.

La TVP obstruye el flujo de sangre que regresa al corazón y hace que se acumule en la extremidad afectada.

A veces, el cuerpo puede compensar el bloqueo desviando gradualmente la sangre a través de las venas vecinas más pequeñas. Con el tiempo, estas venas se agrandan y pueden drenar la sangre de la extremidad.

Si estas venas no aumentan de tamaño, la extremidad puede permanecer hinchada. El dolor y la hinchazón persistentes después de una TVP se denominan síndrome postrombótico.

Las personas que experimentan una TVP deben considerar:

  • elevar la extremidad afectada
  • usar medias de compresión para promover el flujo sanguíneo
  • tomando medicamentos anticoagulantes o anticoagulantes
  • someterse a un procedimiento de colocación de stent, durante el cual un cirujano inserta un tubo llamado stent en la vena para mantenerla abierta

6. Embarazo

Los tobillos hinchados son un efecto secundario común del embarazo.

Durante el embarazo, el cuerpo produce más sangre y fluidos corporales para ayudar al feto en desarrollo.

La hinchazón es un efecto secundario común del embarazo, especialmente en el tercer trimestre. Puede afectar los tobillos, los pies, las piernas, la cara y las manos.

Una ligera hinchazón es normal y generalmente inofensiva. Sin embargo, la hinchazón repentina de las manos y la cara podría ser un signo de una afección potencialmente mortal llamada preeclampsia.

Las mujeres que experimentan una leve hinchazón durante el embarazo pueden obtener alivio con remedios caseros como:

  • comer alimentos con alto contenido de potasio
  • reducir la ingesta de sal
  • evitando la cafeína
  • usando zapatos cómodos
  • usando medias de soporte
  • evitar estar de pie por períodos prolongados
  • elevar los pies en reposo
  • aplicando compresas frías
  • vistiendo ropa holgada
  • limitar el tiempo al aire libre durante el clima caluroso
  • descansando en una piscina

7. Preeclampsia

La preeclampsia es una afección potencialmente mortal que puede ocurrir durante el segundo o tercer trimestre del embarazo o hasta 6 semanas después del parto.

La preeclampsia se caracteriza por una presión arterial peligrosamente alta y proteínas en la orina. Puede causar una variedad de síntomas, que incluyen dolores de cabeza, cambios en la visión, aumento de peso y edema.

La preeclampsia que ocurre durante el embarazo también puede afectar al feto.

Requiere tratamiento médico urgente. El tratamiento puede incluir medicamentos para prevenir convulsiones y disminuir la presión arterial.

Dar a luz al bebé es el tratamiento más eficaz, aunque algunas mujeres pueden experimentar un empeoramiento de los síntomas antes de mejorar.

8. Linfedema

El linfedema es un tipo de hinchazón que afecta los tejidos blandos de los brazos o las piernas, incluidos los tobillos. Se debe a la acumulación de un líquido llamado linfa. Está compuesto principalmente por glóbulos blancos, que ayudan a combatir las infecciones.

El linfedema ocurre cuando hay un bloqueo o algún otro daño en el sistema linfático. El sistema linfático es una red de tejidos y órganos que ayudan a eliminar las infecciones del cuerpo y a mantener el equilibrio de los líquidos.

El linfedema puede resultar de infecciones, cáncer y extirpación quirúrgica de los ganglios linfáticos. Algunas afecciones hereditarias también pueden causar linfedema.

El daño al sistema linfático es irreversible, por lo que el tratamiento tiene como objetivo reducir la hinchazón y prevenir otros síntomas.

Los posibles tratamientos incluyen:

  • usar prendas de presión y vendajes
  • aumentar la frecuencia cardíaca y respiratoria a través del ejercicio
  • recibir un masaje suave de un terapeuta capacitado en el tratamiento del linfedema

9. Insuficiencia cardíaca

La insuficiencia cardíaca ocurre cuando el corazón ya no puede bombear sangre con la eficacia que debería. Hay tres tipos diferentes de insuficiencia cardíaca: insuficiencia cardíaca del lado izquierdo, del lado derecho y congestiva.

En la insuficiencia cardíaca congestiva y del lado derecho, hay una reducción en el flujo de sangre que sale del corazón, lo que hace que la sangre regrese a las venas. Esto puede provocar una acumulación de líquido en los tejidos, incluidos las piernas y los tobillos.

La insuficiencia cardíaca también afecta a los riñones, lo que reduce su capacidad para eliminar la sal y el agua del cuerpo. Esto contribuye aún más al edema.

Aunque no existe cura para la insuficiencia cardíaca, existen muchas opciones de tratamiento diferentes.

Un médico puede recetar medicamentos diuréticos y sugerir controlar y reducir la ingesta de líquidos. Ambos tratamientos pueden ayudar a reducir la hinchazón en los tobillos y las piernas.

10. Enfermedad renal crónica

El ejercicio regular puede ayudar a mantener la función renal.

La enfermedad renal crónica se refiere al daño renal permanente, que puede empeorar con el tiempo.

Es posible que una persona no experimente ningún síntoma hasta que se encuentre en las últimas etapas de la enfermedad, lo que se denomina insuficiencia renal o enfermedad renal en etapa terminal (ESRD).

Durante la ESRD, los riñones luchan por eliminar los desechos y el exceso de líquido del cuerpo. Esto puede provocar una variedad de síntomas, que incluyen tobillos hinchados.

Los siguientes factores de estilo de vida también pueden ayudar a mantener la función renal durante el mayor tiempo posible:

  • reducir la sal y la grasa en la dieta
  • mantener un peso saludable
  • mantener una presión arterial saludable
  • hacer ejercicio durante al menos 30 minutos al día
  • dejar de fumar
  • limitar el alcohol
  • controlar los niveles de azúcar en sangre

11. Enfermedad hepática

El hígado sano produce una proteína llamada albúmina. La albúmina evita que el líquido se filtre de los vasos sanguíneos hacia los tejidos circundantes.

Los niveles muy bajos de albúmina debido a una enfermedad hepática pueden causar una acumulación de líquido en las piernas, los tobillos y el abdomen.

Un médico puede recetar medicamentos y ofrecer consejos sobre ciertos factores del estilo de vida que podrían ayudar a prevenir o retrasar un mayor daño hepático. Ejemplos incluyen:

  • hacer ejercicio regularmente
  • comer una dieta saludable
  • limitar la ingesta de sal
  • evitando el alcohol

12. Hipotoidismo

El hipotiroidismo puede afectar los músculos y las articulaciones de una persona de muchas formas, provocando dolores, rigidez e hinchazón.

Si una persona tiene hipotiroidismo o una tiroides hipoactiva, significa que su glándula tiroides produce muy pocas hormonas.

Un estudio de 2017 sugiere que puede haber un vínculo entre los trastornos de la tiroides y la artritis reumatoide, que también puede causar hinchazón dolorosa en las articulaciones.

Un médico puede realizar un análisis de sangre para verificar los niveles de hormona tiroidea de una persona, y el tratamiento implica tomar hormonas tiroideas sintéticas.

Cuando ver a un doctor

Una persona debe ver a un médico si tiene:

  • calor o enrojecimiento en el área hinchada
  • hinchazón que empeora o no mejora
  • fiebre
  • un aumento repentino de la hinchazón durante el embarazo
  • un historial de enfermedad cardíaca, renal o hepática

Muchos casos de edema o tobillos hinchados se resolverán por sí solos con el tratamiento adecuado en el hogar.

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